Llega el verano y con él las ansiadas vacaciones. Es época de relajarnos de las rutinas cotidianas, pero no por ello debemos descuidar la salud de nuestra piel. Lucir un buen moreno puede ser muy favorecedor pero hay que conseguirlo siempre de la forma más segura para nuestra piel, y la mejor forma de hacerlo es siempre de manera progresiva para evitar las quemaduras solares.
Os dejamos cinco consejos básicos para tomar el sol:
- Evita las horas centrales del día (de 12:00 a 16:00 h). Durante el verano es cuando los rayos de sol son más dañinos ya que llegan a la tierra de forma más perpendicular.
- Utiliza SIEMPRE un buen protector solar. Ésta debe tener como mínimo un factor de protección de 30 y tener en su composición algún agente hidratante.
- Repon el protector solar cada tres horas, y reponer siempre que se salga del agua.
- Si tiene la piel clara y ojos azules-verdes su riesgo de padecer tumores cutáneos inducidos por el sol es muy alto. Evite al máximo la exposición solar y utilice protectores solares incluso en días nublados.
- En la época estival hidrate intensivamente la piel. Las altas temperaturas resecan la piel. Aunque el verano sea una época en la que no se suele hacer uso del maquillaje, es igual de importante limpiar y tonificar la piel, así como aplicar crema hidratante para que no se reseque. No sólo recomendamos hidratarla por fuera, sino también por dentro. Beber al menos dos litros y medio de agua al día, y aprovechar las frutas de temporada para hacer batidos es una buena opción para la salud.
No olvidar cubrir la cabeza con un sombrero de ala ancha y para los ojos usa unas gafas con protección contra las radiaciones ultravioletas. Teniendo en cuenta todos estos consejos para tomar el sol sólo nos queda desearos un muy feliz y merecido descanso.
